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El estudio
Historia y visión
El estudio fué creado en el año 1986, habiendo desarrollado obras y proyectos que abarcan diversas temáticas como viviendas unifamiliares, reciclajes, locales comerciales, edificios de propiedad horizontal etc. El estudio crece y se retroalimenta con la diversidad, pequeños detalles para las grandes obras y todo el know-how de estas aplicadas en la de menor escala.
Se trabaja con dedicación brindando soluciones novedosas y creativas para responder y orientar eficazmente a los requerimientos de los clientes.
La verdadera materia prima de una casa es sueños y recuerdos, historia y futuro, por eso debe ser única e irrepetible.
Considero que desde la primer entrevista con nuestro potencial cliente se dá un intercambio de información entre quien nos convoca y el estudio, explico quien soy, que hice y que hago. Pregunto que necesitan, que esperan de mi, y que objetivos tiene.
Estas respuestas permitirá interiorizarme en el tema que el cliente trae y el emprendimiento que necesita desarrollar, esto tambien permite analizar las posibilidades de hacerlo.
En esta instancia ambos nos damos cuenta si somos compatibles para iniciar juntos una obra, y poder concretar sus sueños y fantasías.
La arquitectura es un sentimiento, quienes la ejercemos nos transformamos en el puente que utiliza el comitente para materializar sus ilusiones.
Alli comienza un camino que recorremos juntos.
Me gusta innovar, la esencia, los detalles, lo cálido, la depuración formal y lo sutil. El proceso creativo es una sucesión de puertas, cada puerta permite abrirse a un nuevo espacio, al desconocimiento, “a la docta ignorancia”.
Proponer la construcción de nuevos recorridos hacia la creación de nuevos saberes.
La vida interior de cada uno es una creación incesante, cada hombre tiene una historia diferente, por lo tanto su mirada va a ser diferente. El proceso de aprendizaje es eterno, en permanente movimiento, en permanente cambio, en permanente duración. La obra de arquitectura simboliza nuestras realidades interiores y exteriores.
Por último un poema de Tomas Borge :
“Los artistas deben ser rebeldes y libres como los pájaros, tener la conciencia al rojo vivo y amar las herejías y los misterios.
Gustar de las fiestas del cuerpo y del alma, de los mitos y las raíces, ser soñadores.
El hombre que no es capaz de soñar es un pobre diablo, y por lo tanto, jamás puede ser un creador”.